Sueño suicida de una mano”, obra de Javier Márquez, tuvo su debut escénico con la actuación de los integrantes de Mazteatro: Ángel Abundis, Natz Landaverde, Ivana Hernández y Ana Urrea, quienes en compañía de Azoteatro lograron llenar la terraza Mr. Lionso.
La obra es un trabajo de diferentes artistas, Javier Márquez creó el guion, la producción y dirección es de Abundis y Landaverde, la parte musical estuvo a cargo de Nartoomid Barraza y su grupo, equipo creativo que recibió formación académica y artística en el Centro Municipal de las Artes.
Antes de iniciar decenas de invitados presenciaron la intervención musical de Nartoomid Barraza, quien acompañado de sus músicos interpretó: “Desde cuándo”, creación de Alejandro Sanz, “Desvelado”, éxito en la voz de Bobby Pulido, y “Si te pudiera mentir” de Marco Antonio Solís, entre otras canciones que el público aplaudió.
En la parte medular de la función, cuatro personajes se encuentran en lo alto de un edificio con una sola cosa en común, ese día han decidido morir. Pero, ¿En realidad será la muerte lo único que tienen en común?.
Después de la tercera llamada salieron a escena los actores: Ángel Abundis quién interpretó a “Samuel” y la actriz Natz Landaverde, dando vida a “La escritora”, personaje sin nombre que desde lo alto de un rascacielos intentaba culminar su último libro y después lanzarse al vacío, pues según ella, esa acción daría un plus a su obra y la ayudaría a ser una escritora consagrada.
Luego de leer el supuesto final de su creación aparece en la azotea la actriz Ana Urrea, y dialogó sobre el suicidio con “La escritora”, argumentado que ella -la segunda en escena- solo subió a ver, no ha lanzarse desde las alturas para culminar con su vida, todo porque tuvo un sueño donde su mano se lo indicaba.
Ruidos extraños se escuchan, ellas se esconden, y aparece Ivana Hernández, quien decide aventarse, pero Ana Urrea se lo impide y la chica con pensamientos suicidas se molesta porque era el medio más efectivo para cumplir su última voluntad.
Ante un suceso extraño aparece “Samuel” con rastros de sangre, todos observan que al fondo hay patrullas, multitud, pero desconocen que pasó, el joven no sabe si se tiró o lo empujaron, pues tenía una cita en ese lugar con su pareja, sangra y no sabe que pasó. Tras una serie de diálogos “La escritora” descubre que él es el personaje de su obra, pero desconoce por qué cobró vida, concluyendo así esta travesía, seguida de una serie de aplausos.
Bendecidos por la oportunidad, los directores de “Sueño suicida de una mano” brindaron un mensaje oportuno donde agradecieron la confianza del público, la de sus patrocinadores y el apoyo de la familia y equipo para llevar a escena esta obra.